Desafío estratégico en la Indy 500
Un inesperado giro de eventos dejó fuera de competencia a Ryan Hunter-Reay durante la edición 2025 de la Indy 500, después de que su auto liderara la carrera durante 48 vueltas gracias a una estrategia alternativa.
El piloto estadounidense logró colocarse en posición de victoria al implementar un overcut en su penúltima parada en pits, superando a rivales como Conor Daly, Alex Palou y David Malukas. Esta maniobra permitió que el campeón de 2014 avanzara en la clasificación a pesar de las adversidades técnicas.
Condiciones extremas y autos de emergencia
La situación era especialmente difícil para Hunter-Reay, quien competía con un vehículo de reserva configurado en un shakedown después de que su auto principal fuera dañado por un incendio ocurrido durante el Carb Day. La preparación acelerada del equipo DRR/Cusick permitió su participación, aunque inicialmente parecía poco probable que pudiera contender por el triunfo.
«Estoy desconsolado. Tuvimos la oportunidad de ganar esta carrera hoy con un auto que no había dado ni una vuelta competitiva antes de que comenzara la carrera», manifestó el piloto por radio tras el incidente.
Interrupción inesperada
Cuando faltaban 31 vueltas para el final, el automóvil del estadounidense sufrió una falla crítica al detenerse repentinamente durante su última parada en pits. La estrategia de esperar hasta el último momento para repostar resultó contraproducente, como él mismo había advertido durante la competencia.
«Sentí que el motor se estaba quedando sin combustible cuando pasé por la Curva 4 para la parada en pits. La última parada en pits fue buena, y estábamos en la posición que queríamos con 31 vueltas restantes. Pero sentíamos que nos quedábamos sin combustible y el motor se paró».
Consecuencias y reflexión final
El problema técnico no solo lo dejó fuera de carrera en el lugar 24, sino que también implicó fallas en el sistema de aceleración que imposibilitaron cualquier remontada. Aunque Hunter-Reay reconoció el buen trabajo del equipo y la mejora del auto durante la segunda mitad de la prueba, lamentó profundamente la oportunidad perdida.
«Creo que habríamos salido de pits con dos rezagados entre Palou y yo, y en la posición ideal para ganar la carrera. Es una situación desgarradora hoy. Nos va a costar un tiempo superarla», concluyó el piloto del No. 23.
