Un grupo de científicos de Mayo Clinic logró un avance significativo en la preservación de órganos donados, según revela una investigación publicada en Nature Cardiovascular Research. El estudio, dirigido por el Dr. Paul Tang, especialista en cirugía cardíaca, identificó el mecanismo biológico responsable del deterioro de los corazones durante su almacenamiento, lo que podría permitir prolongar el tiempo de preservación y aumentar el número de trasplantes exitosos.
Mecanismo biológico detrás del deterioro
El equipo descubrió que el receptor de mineralocorticoides, una proteína presente en el corazón, experimenta un fenómeno llamado separación de fases líquido-líquido durante el enfriamiento prolongado. Este proceso genera acumulaciones de proteína que incrementan la inflamación y provocan muerte celular, afectando la funcionalidad del órgano.
Tratamiento experimental mejora resultados
Mediante el uso de canrenona, un fármaco que inhibe la acción de dicha proteína, los investigadores lograron preservar mejor la función cardíaca. Los órganos tratados mostraron una mejora notable en su capacidad de bombeo, con flujo sanguíneo más eficiente y menos daño celular incluso después del tiempo habitual de conservación. La fuerza de contracción aumentó casi tres veces en los corazones donados que recibieron el tratamiento.
Impacto potencial en trasplantes
“Como cirujano cardiovascular, he experimentado personalmente en el quirófano cómo cada hora adicional de preservación puede influir directamente en la probabilidad de que un corazón de donante vuelva a funcionar con normalidad después del trasplante”, declaró el Dr. Tang.
El especialista destacó que este descubrimiento representa una herramienta innovadora para mantener la funcionalidad del corazón durante más tiempo, mejorando así los resultados de los trasplantes y facilitando el acceso a procedimientos que salvan vidas. Actualmente, menos del 50% de los corazones donados se utilizan debido a la pérdida de funcionalidad durante el almacenamiento, limitando las opciones para los pacientes en lista de espera.
Posibles aplicaciones en otros órganos
Los análisis preliminares sugieren que procesos similares ocurren en pulmones, hígados y riñones conservados en frío, lo que indica que este enfoque podría ser aplicable a la preservación de múltiples órganos, ampliando significativamente el impacto de este hallazgo en la medicina trasplantológica.