El equipo de los New York Knicks logró mantenerse en carrera luego de superar a los Indiana Pacers en el quinto encuentro de las finales del Este de la NBA, disputado este jueves. Las actuaciones de Jalen Brunson y Karl-Anthony Towns resultaron fundamentales para el triunfo, permitiendo que el sexto juego se defina en territorio rival.
Desempeño sobresaliente de las figuras
Bajo la presión de la eliminación, Brunson lideró al equipo con 32 unidades y 5 asistencias, estableciendo el tono desde los primeros minutos. Por su parte, Towns complementó con un doble-doble de 24 puntos y 10 rebotes, destacando especialmente en el segundo cuarto. La combinación ofensiva entre ambos permitió a los Knicks controlar el encuentro de forma constante, ampliando la ventaja en la segunda mitad.
Mejora defensiva determinante
La defensiva mostró una notable mejora en comparación con partidos anteriores, conteniendo a Indiana al 40% de efectividad en tiros y provocando 20 pérdidas de balón. Tyrese Haliburton, quien había tenido una actuación impecable en el partido previo, concluyó con apenas 8 puntos y 2 de 7 tiros convertidos, mientras que Aaron Nesmith apenas aportó un triple en cinco intentos. El único jugador que logró destacar por Indiana fue Bennedict Mathurin, quien sumó 23 puntos saliendo desde el banco.
Perspectiva de remontada histórica
Con el marcador de la serie en 3-2 a favor de Indiana, los Knicks tienen la oportunidad de convertirse en el decimocuarto equipo en la historia de la NBA en conseguir una remontada desde un 3-1. El sexto enfrentamiento se desarrollará este sábado en Indianápolis, escenario donde New York ya había conseguido una victoria el domingo anterior. En caso de repetir resultado, la definición se trasladaría al Madison Square Garden para un séptimo y definitivo partido.
