Una coalición integrada por 39 grupos ecológicos y comunidades locales realizó una protesta frente a las oficinas de la Secretaría de Energía (Sener) en la Ciudad de México. La movilización busca detener los proyectos de Gas Natural Licuado (GNL) que según los manifestantes ponen en peligro la biodiversidad del Golfo de California.
Acciones simbólicas y participación infantil
Como parte de su campaña, la Red de Escuelas Salva Ballenas presentó más de 1,500 dibujos elaborados por menores de edad de 19 estados del país. Los trabajos artísticos fueron exhibidos en las instalaciones de la dependencia federal y muestran imágenes de ballenas, delfines y paisajes marinos, acompañados de mensajes sobre la protección del patrimonio natural mexicano.
Riesgos para la vida marina
Según explicó Pablo Montaño, director de Conexiones Climáticas, los proyectos implicarían el paso de embarcaciones de más de 300 metros por la zona, lo cual representa una amenaza para las ballenas. Señaló que estas especies pueden morir al colisionar con grandes barcos y que el ruido producido por las embarcaciones afecta su principal sentido: la audición, que utilizan para orientarse, detectar peligros y comunicarse.
Impacto en la economía local y el medio ambiente
La coalición alertó que las instalaciones propuestas en Puerto Libertad, Topolobampo y Guaymas afectarían actividades económicas locales como la pesca y el turismo de avistamiento de ballenas. Además, destacaron que el gas natural, compuesto principalmente por metano, es 80 veces más contaminante que el dióxido de carbono, lo que profundizaría la crisis climática global.
Compromisos internacionales y defensa del ecosistema
Las organizaciones recordaron que el Golfo de California alberga el 39% de las especies de mamíferos marinos del mundo, incluyendo a la ballena azul, una especie en peligro de extinción. Enfatizaron que México tiene compromisos climáticos internacionales que no son compatibles con la expansión de proyectos basados en combustibles fósiles y que la Sener tiene facultades legales para negar permisos a proyectos que agraven la crisis climática.
Rechazo a empresas extranjeras y demanda de acción
La campaña ‘Ballenas o Gas’ ha logrado recolectar alrededor de 300,000 firmas en contra de los proyectos impulsados por empresas estadounidenses. Durante la manifestación, Javier, un niño de 10 años, cuestionó públicamente a la titular de la Sener con la frase que da nombre a la campaña: “¿Ballenas o gas?”.
“¿Ballenas o gas?”
El biólogo marino Cui Corrales, administrador de La Biologolife, expresó en redes sociales que los dibujos infantiles representan un llamado urgente a priorizar la vida marina sobre intereses económicos. Advirtió que no cesarán en su lucha hasta garantizar un futuro para las ballenas en los mares mexicanos.