Presidente responde a amenaza de restricción de movilidad
El mandatario colombiano Gustavo Petro emitió una declaración pública en respuesta al anuncio de un grupo armado ilegal que opera en Guaviare. La organización, liderada por alias ‘Iván Mordisco’, decretó un toque de queda que impedirá el desplazamiento de personas y vehículos en ciertas áreas.
En su intervención, el jefe de Estado propuso que las comunidades realicen actividades colectivas nocturnas como una forma de oposición simbólica.
“Verbena popular todas las noches, ese debe ser el mensaje”
, afirmó Petro, reflejando su postura frente a las imposiciones de los grupos ilegales.
Demanda presencia institucional reforzada
El presidente enfatizó que las Fuerzas Armadas deben mantener una vigilancia constante en todos los municipios del departamento.
“El comandante del Ejército en esta área me responde personalmente”
, aseguró, destacando la responsabilidad directa de las autoridades militares.
El toque de queda, comunicado mediante un audio, comenzará el sábado 7 de junio y afectará a toda la población. Según el mensaje del grupo armado:
“Por temas de seguridad y con el fin de salvaguardar la vida de los habitantes, a partir del sábado 7 de junio se decreta toque de queda. Se prohibirá la movilidad en motos, motocargueros y vehículos de servicio público o particulares”
.
Confrontaciones generan crisis humanitaria
Los enfrentamientos entre organizaciones ilegales, específicamente entre las lideradas por ‘Iván Mordisco’ y ‘Calarca’, han generado un estado de emergencia en la región. Las comunidades rurales han sufrido confinamientos, desplazamientos forzados y suspensiones prolongadas en servicios básicos, incluyendo la educación.
Organismos internacionales como Naciones Unidas han documentado el agravamiento de las condiciones de vida, con cientos de familias desplazadas. Varios planteles educativos han suspendido labores indefinidamente debido a la inseguridad.
Contexto de violencia extendida
El conflicto en Guaviare forma parte de un fenómeno más amplio de reorganización de grupos armados en el país. Las disidencias de las Farc, especialmente el Estado Mayor Central, han aumentado su presencia en varias zonas del sur, generando un incremento de la violencia en regiones como Caquetá, Meta, Putumayo y Guaviare.
Las autoridades militares han intensificado sus operaciones en la región, desplegando refuerzos desde otras áreas. Se planea realizar una evaluación de seguridad en los próximos días para definir nuevas estrategias que permitan recuperar el control en los núcleos urbanos afectados.
Acciones de apoyo a población afectada
El gobierno nacional ha iniciado coordinaciones con la Defensoría del Pueblo, la Unidad para las Víctimas y la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) para brindar atención a las comunidades impactadas por los enfrentamientos.
La población local continúa esperando medidas concretas que aseguren su protección, restablezcan el orden público y detengan la expansión de los grupos ilegales en sus territorios.
