Escalada bélica sin precedentes
El domingo, Israel llevó a cabo nuevos ataques aéreos contra instalaciones vinculadas al programa nuclear iraní, en lo que constituye la tercera jornada consecutiva de enfrentamientos militares entre ambas naciones. Según reportes oficiales, los misiles iraníes han causado al menos 13 fallecimientos en territorio israelí.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que su país está determinado a neutralizar cualquier amenaza nuclear proveniente de Irán, asegurando que se atacarían “todos los objetivos del régimen”. La ofensiva inició el viernes con bombardeos a instalaciones militares y nucleares que resultaron en múltiples víctimas, incluyendo científicos y altos mandos de los Guardianes de la Revolución.
Ataques múltiples y represalias inmediatas
Entre sábado y domingo, las fuerzas israelíes atacaron diversos complejos de defensa iraníes, incluyendo el Ministerio de Defensa y la sede del proyecto nuclear SPND. Testigos reportaron explosiones en Teherán, mientras que autoridades iraníes confirmaron daños leves en algunas instalaciones gubernamentales y depósitos de combustible.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, utilizó redes sociales para afirmar: “Teherán arde”. Como respuesta, Irán lanzó misiles contra diferentes zonas de Israel, provocando que millones de ciudadanos buscaran refugio al sonar las alarmas antiaéreas. Las autoridades israelíes reportaron 13 muertos y más de 300 heridos leves desde el inicio de los enfrentamientos.
Posiciones internacionales y tensiones diplomáticas
El presidente Donald Trump advirtió que Estados Unidos respondería con “toda su fuerza” ante cualquier ataque a su territorio, aunque aclaró que no participó en los bombardeos israelíes. Por otro lado, el mandatario estadounidense y su homólogo ruso, Vladimir Putin, coincidieron en la necesidad de poner fin al conflicto durante una conversación telefónica.
El gobierno iraní, por su parte, canceló negociaciones indirectas previstas en Omán tras acusar a Israel de interferir en los diálogos. Teherán también anunció que suspenderá su cooperación con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) debido a lo que considera su silencio ante los ataques israelíes.
Impacto humano y regional
Los bombardeos han dejado un saldo de al menos 78 fallecidos y 320 heridos en Irán, según informó su representante ante la ONU, Amir Saeid Iravani, destacando que la mayoría de las víctimas son civiles. Entre los fallecidos figuran nueve científicos nucleares y altos oficiales militares.
El presidente iraní, Masud Pezeshkian, advirtió que su país responderá de manera más contundente si continúan los ataques israelíes. Mientras tanto, el espacio aéreo de Irán permanece cerrado indefinidamente, al igual que el aeropuerto internacional Ben Gurion en Israel.
“Es normal que la guerra provoque estrés, pero no voy a abandonar mi ciudad (…) Ya hemos vivido episodios similares en el pasado y tengo fe en mi país”, afirmó Chokouh Razzazi, ama de casa de 31 años en Teherán.