La Escuela Judicial del Estado de México ha diseñado un programa intensivo de capacitación de dos meses y medio para preparar a nuevos jueces electos por voto popular, quienes asumirán funciones el 5 de septiembre. Entre los participantes se encuentra Alejandro Tapia González, electo como juez mixto del distrito de Chalco con más de 25,000 votos, a pesar de no contar con experiencia previa en tribunales ni haber emitido nunca una sentencia.
Desafíos de una formación acelerada
“Yo no tengo esa experiencia completa. Nosotros venimos con otra experiencia: ciertamente administrativa, a lo mejor política, social o de simple postulante“, reconoció Tapia González durante una entrevista. A pesar de su trayectoria como regidor, asesor legislativo y académico, el nuevo juez admitió sentirse inseguro frente a colegas con décadas de experiencia: “Cuando otros presumen su currícula, pues me siento chiquito, la verdad“.
El programa de formación incluye inicialmente contenidos comunes para todos los electos, seguido de especialización en áreas específicas. Tapia González forma parte del grupo que se enfocará en materia civil, familiar y mercantil, las tres disciplinas que deberá manejar como juez mixto.
Evaluación constante y acompañamiento
María del Refugio Elizabeth Rodríguez, directora de la Escuela Judicial estatal, destacó que normalmente la formación completa de un juez requiere alrededor de un año: “No puede ser menos de seis meses, más otros tres del proceso de oposición. El proceso completo toma más o menos un año“. Sin embargo, para adaptarse a la nueva realidad de jueces electos por voto popular, el programa se redujo drásticamente.
La capacitación incluye una etapa práctica donde los nuevos jueces observarán audiencias reales y trabajarán bajo supervisión directa: “Tendrán un mentor a su lado, pero estarán viendo casos reales, estructuras internas, resoluciones, acuerdos… todo en tiempo real“, explicó Rodríguez. La directora anticipó que esta fase marcará un “antes y después”: “Cuando estén frente a una audiencia de control de detención, con minutos para decidir, van a sentir el peso real del cargo“.
Debate sobre modelo judicial
El nuevo juez electo reconoció la existencia de tensiones entre jueces de carrera tradicional y aquellos elegidos mediante voto popular: “Desde que se abrieron las convocatorias, descubrí el debate entre lo que es la carrera judicial y esta apertura para que el pueblo decida“. Aunque admitió que “es un reto porque… choca un poco“, ve en esto una oportunidad para acercar la justicia a la ciudadanía.
Rodríguez también abordó esta problemática: “Algunos llegan y dicen: ‘A mí no me eligió el tribunal, yo vengo por el voto’. Pero nuestra tarea es ayudarles a entender el camino“. La directora insistió en que “la preparación debe ser condición, no consecuencia. Queremos los mejores jueces, y para eso no basta con ir a votar“.
“Un juez no se forma en dos meses. Las competencias para impartir justicia no las da solo la universidad: eso lo enseña una escuela judicial, con práctica, acompañamiento y experiencia real“
— María del Refugio Elizabeth Rodríguez
Ambos reconocieron que la capacitación es solo el inicio de un proceso continuo: “Esto no termina jamás. Es continuo. Porque nuestras leyes presentan muchas contradicciones entre lo que dice el legislador, lo que dice la norma y lo que dice la realidad“, afirmó Tapia González. La directora agregó que los nuevos jueces serán evaluados permanentemente por el Tribunal de Disciplina.
