Un facultativo de Alemania, identificado como Johannes M. por cuestiones de privacidad, se encuentra en proceso legal en Berlín por su presunta participación en la muerte de quince pacientes bajo su cuidado. El caso, que se inició con la investigación de cuatro casos sospechosos, escaló durante el año pasado hasta incluir muertes ocurridas entre septiembre de 2021 y julio de 2023.
Acusaciones y posibles penas
La fiscalía lo sindica de 15 cargos de homicidio con alevosía y otros móviles considerados despreciables. La sentencia máxima por estos delitos en Alemania es la prisión perpetua. En caso de que se determine una culpabilidad particularmente grave, el acusado no podría optar a la libertad condicional tras los quince años habituales. Además, se busca una inhabilitación permanente para ejercer la medicina.
Método presuntamente utilizado
De acuerdo con las autoridades, el hombre administraba anestésicos y relajantes musculares a las víctimas sin su consentimiento, provocando parálisis respiratoria que concluía con sus vidas en minutos. Las edades de los fallecidos oscilan entre los 25 y los 94 años, la mayoría en sus domicilios particulares. Las muertes, aunque afectaron a personas con enfermedades graves, no eran inminentes según la fiscalía.
Investigación paralela y otros casos
Además del juicio principal, existen investigaciones en curso sobre otros 395 casos analizados por un equipo especializado de homicidios y la fiscalía local. Hasta ahora, se han confirmado 95 casos con sospechas válidas, de los cuales 75 permanecen en investigación. Entre los casos pendientes se encuentra el de la suegra del propio acusado, quien falleció durante una visita médica de éste en 2022.
Pruebas y testimonios
Johannes M., quien no solicitó evaluación psiquiátrica previa al juicio, será observado en el tribunal por un experto para emitir un dictamen sobre su personalidad. La defensa, representada por Christoph Stoll, indicó que el acusado no presentará declaración inicial. Actualmente se han programado 35 audiencias hasta enero de 2026, con la posibilidad de escuchar a alrededor de 150 testigos.
Un caso específico detallado
Uno de los casos más destacados involucra a una mujer de 56 años que murió en septiembre pasado. Según la acusación, el médico le administró sustancias prohibidas el 5 de septiembre, simulando posteriormente un paro cardíaco. Tras ser reanimada por personal de emergencias, el facultativo contactó a las hijas de la víctima, revelando que había ignorado el testamento vital que prohibía medidas prolongadoras de vida. Con su consentimiento, se suspendió el soporte vital y la paciente falleció tres días después en un hospital de Berlín.
