Los tres hijos mayores del expresidente brasileño Jair Bolsonaro –Flávio, Eduardo y Carlos– han expresado públicamente su descontento hacia sectores de la derecha que buscan sustituir a su padre como líder de la oposición antes del inicio de su proceso judicial por el intento de golpe de Estado de 2023, en un contexto de indefinición sobre quién será el candidato de la derecha para las elecciones presidenciales de 2026.
Críticas de los hijos del exmandatario
Flávio Bolsonaro, actual senador por Río de Janeiro, manifestó que este no es el momento para marginar a su padre, sino para demostrarle “solidaridad”, en alusión a las ambiciones políticas del gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, considerado el principal aspirante opositor frente al actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva. “No conozco ningún candidato a la Presidencia que haya tenido éxito anticipándose tanto. Normalmente nadie aguanta tanto tiempo y acaba quemándose”, señaló el hijo mayor del exjefe de Estado.
Presión sobre el partido y posibles rupturas
Las tensiones internas se intensificaron cuando Valdemar Costa Neto, líder del Partido Liberal (PL), partido al que pertenece Bolsonaro, propuso públicamente la afiliación de De Freitas durante un evento empresarial donde se discutía una estrategia para enfrentar a Lula. Esta sugerencia generó desacuerdo en Eduardo Bolsonaro, quien reside en Estados Unidos desde febrero promoviendo la liberación de su padre, y podría incluso llevarlo a abandonar el partido si finalmente De Freitas acepta la propuesta, según reporta el periódico ‘O Globo’.
“Lo advierto ya para que no vengan después con la letanía de que desuno a la derecha o soy radical: con el chantaje no conseguirán nada”, escribió Eduardo en X junto a una imagen de su padre y sus hermanos, incluido Carlos.
Condenas y desafíos legales
La insistencia de Bolsonaro por mantener su liderazgo político enfrenta obstáculos legales. Además del juicio inminente por su presunta participación en el intento de golpe de Estado de enero de 2023, el exmandatario ya enfrenta una inhabilitación hasta 2030 por abuso de poder político y uso indebido de recursos estatales. En junio de 2023, el Tribunal Superior Electoral determinó que Bolsonaro incurrió en estas faltas al emplear el Palacio de la Alvorada para reunirse con diplomáticos extranjeros con el objetivo de cuestionar la confiabilidad del sistema electoral brasileño.
Según la Justicia, estos hechos, junto con otras acciones previas a las elecciones de octubre de 2022, en las que Bolsonaro tardó en reconocer su derrota mientras sus seguidores permanecían en protestas callejeras pidiendo una intervención militar, fueron elementos clave que condujeron al asalto al Congreso y al Supremo en enero de 2023.
Escenario electoral incierto
Las encuestas reflejan un empate técnico entre una potencial contienda directa entre De Freitas y Lula, quien aún no ha confirmado oficialmente su candidatura, aunque ha expresado su disposición a postularse si su estado de salud lo permite. En el momento de las elecciones, Lula tendría 80 años cumplidos.