Alerta en Hawaii por oleaje extremo
El huracán Kiko, con vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora, ha activado alertas en Hawaii debido al riesgo de oleaje clasificado como “potencialmente mortal” y condiciones peligrosas en las costas de las islas.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) reportó que el oleaje afectará inicialmente a la Isla Grande y Maui a partir del 7 de septiembre, alcanzando su máxima intensidad entre el lunes y mediados de semana.
Preocupación por seguridad marítima
La amenaza principal reside en el peligro que representa el oleaje para residentes, turistas y actividades en el mar. “Estas olas se irán incrementando y se espera que alcancen su punto máximo en las costas orientadas al este de las islas hawaianas entre el final del lunes y mitad de semana, con riesgo de presentarse corrientes de resaca y oleaje capaz de poner vidas en peligro”, señaló el NHC. Autoridades locales recomendaron evitar zonas de rompientes y monitorear continuamente los informes meteorológicos.
Declaración de emergencia y pronóstico
El gobierno de Hawaii emitió una declaratoria de emergencia el domingo ante el avance del ciclón, que actualmente se encuentra en categoría 3 de la escala Saffir-Simpson. La gobernadora interina Sylvia Luke mencionó que “se esperan precipitaciones intensas y olas de gran tamaño, especialmente el lunes”, destacando que aunque el huracán muestra indicios de debilitamiento, persisten los riesgos por “cambios bruscos en el clima y el mar durante el transcurso de la semana”.
Trayectoria y evolución del fenómeno
De acuerdo con el NHC, el huracán se localizaba a 1,150 kilómetros al este de Hilo, desplazándose hacia el noroeste a una velocidad de 21 kilómetros por hora. Aunque su trayectoria prevista lo llevará al norte del archipiélago, no se descartan lluvias dispersas y un mar agitado que podrían afectar las islas al inicio de la semana.
“Se espera que Kiko continúe debilitándose y podría convertirse en tormenta tropical hasta la mañana del martes, alejándose del archipiélago”, indicó el NHC en su último reporte. El fenómeno, que inició como tormenta de categoría 1 en el Pacífico oriental, alcanzó su máxima intensidad el sábado con vientos de 215 km/h cerca de Hilo, antes de ser degradado a categoría 3.
Recomendaciones de autoridades
A pesar de que actualmente no hay avisos de huracán activos, autoridades insisten en la necesidad de mantenerse alerta. “Debemos mantener la cautela. Las condiciones del mar pueden cambiar abruptamente y es fundamental no subestimar la fuerza de la naturaleza”, reiteró la gobernadora Luke.
