El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó que la embarcación atacada por Estados Unidos en el Mar Caribe el fin de semana era de bandera colombiana y transportaba nacionales del país. La acción militar, realizada frente a la costa de Venezuela, dejó un saldo de cuatro personas fallecidas, según informó el Departamento de Guerra de EE.UU.
Revelaciones del mandatario colombiano
“Indicios muestran que la última lancha bombardeada era colombiana con ciudadanos del país en su interior. Espero que aparezcan sus familias y denuncien”, expresó Petro desde Bruselas, donde se encuentra en una gira por Europa. El mandatario también advirtió que “se ha abierto un nuevo escenario de guerra: el Caribe”, al referirse al aumento de operaciones militares estadounidenses en la región.
Hasta el momento, ni la Casa Blanca ni el Pentágono han respondido a las solicitudes de comentarios de Reuters. Tampoco se han dado declaraciones oficiales detalladas por parte de otros funcionarios del gobierno colombiano respecto a las afirmaciones de Petro.
Acciones militares de EE.UU. en la zona
El domingo 5 de octubre, el presidente estadounidense Donald Trump anunció que sus fuerzas atacaron una embarcación que supuestamente transportaba drogas ilegales en aguas del Caribe. Desde entonces, el Ejército de EE.UU. ha llevado a cabo al menos cuatro operaciones similares en las últimas semanas, todas justificadas como parte de una estrategia para combatir el narcotráfico proveniente de Sudamérica.
“Cuatro narcoterroristas a bordo del buque murieron en el ataque y ningún miembro de las fuerzas estadunidenses resultó herido”.
Así lo declaró el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, quien además indicó que la orden provino directamente del presidente Trump. El despliegue militar incluye siete buques de guerra, un submarino de propulsión nuclear y cazas furtivos F-35, operando en el área de responsabilidad del Comando Sur de EE.UU.
Reacciones regionales y escalada de tensiones
El ministro de Defensa de Venezuela, el general Vladimir Padrino, calificó el despliegue estadounidense como una “amenaza seria” y señaló que el presidente Nicolás Maduro ha convocado a una “contraofensiva”. Las tensiones entre Washington y Caracas han crecido desde el regreso de Trump a la presidencia en enero, con acusaciones cruzadas sobre narcotráfico y aspiraciones geopolíticas.
Washington ha publicado en redes sociales al menos cuatro anuncios sobre estos ataques, acompañados de videos cortos de las operaciones. Hasta ahora, se han contabilizado 21 muertos a bordo de las embarcaciones atacadas. EE.UU. no ha revelado evidencia concreta contra las embarcaciones ni detalles sobre las municiones, plataformas utilizadas o la cantidad de drogas incautadas.
En agosto, el gobierno estadounidense duplicó a 50 millones de dólares la recompensa por información que lleve al arresto de Maduro, a quien acusa de vínculos con el narcotráfico. Maduro niega todas las acusaciones y sostiene que la ofensiva busca desestabilizar su gobierno.
