Desde las primeras horas de la madrugada del 12 de octubre, miles de devotos se congregaron en los alrededores de la Catedral Metropolitana de Guadalajara para dar inicio a la 191 edición de la Romería de la Virgen de Zapopan. La tradicional procesión marcó el retorno de ‘La Generala’ a su santuario en la Basílica de Zapopan, tras su estancia en el corazón de la capital jalisciense.
Preparativos y misa de despedida
La jornada de fe arrancó a las 5:00 horas con la celebración de la Misa de Despedida en la Catedral Metropolitana, presidida por Monseñor Engelberto Polino Sánchez, obispo electo de Tepic. Durante la homilía, el prelado reflexionó sobre tres actitudes marianas: levantarse, caminar presurosa y saludar, destacando el dinamismo de la fe y la necesidad de servir al prójimo. Señaló que, aunque la imagen física de la Virgen regresa a su Basílica, su presencia maternal permanece constante entre los fieles.
Mientras se desarrollaba la ceremonia, en el exterior del templo se ultimaban los preparativos para el traslado de la imagen. El personal encargado adornó el ‘calabrote’, el carro ceremonial que transportaría a la Virgen durante los 9.2 kilómetros de recorrido. A las 6:15 horas, tras concluir la misa, los frailes franciscanos retiraron con devoción a la imagen del pedestal y la colocaron en el vehículo procesional.
Inicio de la procesión y desfile de devotos
Minutos después, a las 6:20, comenzó formalmente la marcha, encabezada por grupos tradicionales como danzantes, la Adoración Nocturna, Caballeros de Colón y contingentes juveniles. Estos grupos abrieron paso a la columna humana que avanzó por el Andador 16 de Septiembre, luego por Juárez, Vallarta y Américas, siguiendo la ruta tradicional.
A las 6:40, los peregrinos ya abarrotaban las avenidas principales, muchos con promesas, peticiones o agradecimientos. Algunos prefirieron apostarse en puntos estratégicos del trayecto para evitar aglomeraciones en el origen. La multitud, devota y expectante, llenó de cánticos y rezos el recorrido.
En torno a las 8:00, la imagen avanzaba por la avenida Américas, tras ajustes logísticos en el punto de partida. Se prevé que llegue a los Arcos de Zapopan cerca de las 10:30 horas, para luego ser llevada en andas por los últimos metros hasta la Basílica, donde se celebrará la Misa de Bienvenida en el atrio.
Un acto de fe y solidaridad nacional
La Romería no solo congregó a tapatíos, sino a familias de todo el país. Una representación proveniente de Hidalgo llamó la atención por su súplica: pidieron a la Virgen intercesión para su comunidad, afectada recientemente por el paso del Huracán Priscilla. Su presencia subrayó cómo la devoción a ‘La Generala’ trasciende fronteras estatales.
En un gesto profundamente emotivo, familiares de personas desaparecidas acompañaron a la procesión con lonas y fotografías de sus seres queridos. Encomendaron a la Patrona la localización de sus familiares, en un acto que evidenció la ausencia de respuestas por parte de las autoridades.
Operativo de seguridad y logística
Para garantizar el orden, se desplegó un operativo masivo con más de 2,800 servidores públicos de 21 dependencias. El Centro de Mando C5 Zapopan coordinó más de 200 unidades vehiculares y un helicóptero para vigilancia aérea. Los cierres viales se implementaron desde las 2:00 horas, afectando tramos de Hidalgo, Juárez y otras calles aledañas. Además, las estaciones Plaza Patria y Zapopan Centro de la Línea 3 del Tren Ligero permanecieron cerradas hasta las 13:00 horas.
La ruta oficial incluye: Andador 16 de Septiembre, Juárez, Vallarta, Américas, hasta los Arcos de Zapopan, y finalmente el Andador 20 de Noviembre hacia la Basílica. Esta tradición, que comenzó en 1735 y se trasladó al 12 de octubre en 1951, sigue siendo un pilar de la identidad católica en Jalisco.