En un hecho sin precedentes, Hamás liberó a los 13 rehenes israelíes que aún mantenía en cautiverio en la Franja de Gaza, poniendo fin a más de dos años de secuestro y marcando un hito en el proceso de paz. Los liberados fueron trasladados a centros médicos en Tel Aviv tras recibir evaluaciones médicas preliminares, según confirmó el Ejército de Israel.
Liberaciones masivas y supervisión internacional
Entre los rehenes rescatados se encuentran jóvenes capturados durante el ataque al festival de música Nova, así como ciudadanos con doble nacionalidad, entre ellos los argentinos Ariel y David Cunio. La Cruz Roja supervisó el operativo y aseguró que ya no hay rehenes vivos en manos de milicias palestinas. Por su parte, Israel anunció que recuperará los cuerpos de 28 personas que fallecieron durante su cautiverio.
Como contraparte del acuerdo, Israel puso en libertad a 1.968 prisioneros palestinos, incluidos 250 condenados a cadena perpetua. De este grupo, 154 fueron trasladados a Egipto, donde recibieron atención médica antes de proseguir hacia El Cairo.
Trump encabeza el respaldo internacional
El presidente estadounidense Donald Trump calificó la jornada como “un día de profunda alegría” y pronunció un discurso ante la Knéset en Jerusalén, donde afirmó que este acuerdo “marca el fin de una era de terror y muerte y el comienzo de una armonía duradera para Israel y las naciones del Medio Oriente”.
Trump, recibido en Tel Aviv por el primer ministro Benjamín Netanyahu y el presidente Isaac Herzog, visitó a familiares de los rehenes antes de viajar a Egipto para participar en la Cumbre de Paz en Sharm el Sheij, donde líderes de alrededor de treinta países ratificarán formalmente el pacto.
Acuerdo histórico y ausencia notoria
El pacto, negociado con la mediación de Estados Unidos, Egipto, Catar y Turquía, contempla además la retirada parcial de las fuerzas israelíes de Gaza y el envío de ayuda humanitaria a la región. A pesar de la trascendencia del evento, Netanyahu decidió no asistir a la cumbre, alegando coincidencia con el feriado judío de Simjat Torá.
“Este es el amanecer histórico de un nuevo Oriente Medio”
, declaró Trump, destacando el respaldo unánime que, según afirmó, por primera vez en décadas, parece unificar a la región.
