En un evento realizado en Cacalchén, Yucatán, el vicepresidente de la Mesa Directiva del Senado, Jorge Carlos Ramírez Marín, encabezó junto al presidente municipal, Manuel Orozco Aké, la distribución de mil kilogramos de azúcar destinados a apicultores locales, con el propósito de mejorar la alimentación de las colonias de abejas y reforzar el equilibrio ecológico de la zona.
Apoyo Continuo a la Actividad Apícola
Esta entrega representa la cuarta fase del programa de fomento a la apicultura impulsado por el legislador, que ya acumula cuatro toneladas de azúcar distribuidas en comunidades como Halachó, Izamal, Kinchil, Maxcanú y ahora Cacalchén. La iniciativa busca fortalecer a pequeñas familias dedicadas a esta labor ancestral, sin importar su filiación política.
El senador del Partido Verde destacó que la apicultura no solo es un sustento económico, sino una práctica clave para la conservación del medio ambiente.
“El objetivo es que los pequeños apicultores continúen con esta actividad indispensable, para que nadie tenga que abandonar sus apiarios”
, afirmó, al tiempo que insistió en el uso directo del azúcar en las colmenas para mantener sanas y productivas a las abejas.
Relevancia Económica y Cultural de la Miel
El político subrayó que Yucatán figura como el tercer productor nacional de miel en exportación, aunque su consumo interno permanece rezagado a pesar de sus beneficios nutricionales. Asimismo, recordó la trascendencia histórica de las abejas meliponas en la cosmovisión maya, reafirmando su valor actual para la supervivencia del ecosistema.
Como parte de su intervención, Ramírez Marín invitó a las comunidades de Cacalchén a aprovechar los servicios médicos disponibles en la Clínica Comunitaria Wilma Marín, ubicada en Motul, como alternativa accesible para atender necesidades de salud en la región.