Al llegar a Binh Phuoc para establecer un emprendimiento en la década de los 90, después de más de tres décadas radicados en esta región, los miembros de la familia de Luong Huy Thang junto con los grupos étnicos Tay y Nung continúan practicando ceremonias en honor a sus ancestros y divinidades al concluir cada temporada de recolección. A diferencia de sus raíces en el norte montañoso donde se festejaba la cosecha de arroz, en esta localidad se realiza un ritual especial denominado “resumen de la cosecha de anacardo”, enfocado en el principal cultivo de la zona.
Elementos tradicionales en la ofrenda
Para estos eventos, los integrantes del club musical Tinh y Then de Phuoc Son elaboran distintos platillos como pasteles de artemisa y fruta gac que forman parte esencial de la bandeja de ofrendas. “Aquí el anacardo representa nuestra principal fuente de sustento, por eso al finalizar su recolección organizamos estas ceremonias para solicitar buena salud para nuestras familias y prosperidad en futuras cosechas, además de pedir condiciones climáticas favorables”, explicó Luong Huy Thang.
Además de los platos básicos como arroz pegajoso y pollo, se incluyen preparaciones específicas transmitidas generacionalmente: pasteles de hojas teñidas, platillos khau nhuc y otros manjares con ingredientes y técnicas propias de las etnias Tay y Nung.
Expresiones artísticas en la ceremonia
Durante la celebración, los participantes se reúnen alrededor del altar ancestral cantando melodías tradicionales de Then. “Este tipo de canto no solo refuerza nuestra identidad cultural, sino que también fortalece los lazos comunitarios. Es una oportunidad para preservar nuestras tradiciones mientras celebramos juntos el fruto de nuestro trabajo”, destacó Hoang Thi Loan, coordinadora del grupo musical local.
Las presentaciones musicales, que incluyen himnos patrióticos y expresiones de gratitud, se integran naturalmente al ritual, transformando la ceremonia en un evento cultural significativo.
Perspectiva institucional sobre la preservación cultural
Nguyen Van Luu, representante del gobierno distrital, enfatizó: “La diversidad cultural de Bu Dang es un activo invaluable. Cada grupo étnico aporta rasgos únicos que, combinados con nuestros recursos naturales y actividades agrícolas, pueden convertirse en atractivos turísticos diferenciados”.
Las autoridades locales reconocen la importancia de mantener vivas estas prácticas ancestrales, considerándolas elementos fundamentales para construir una identidad regional que refleje la riqueza de sus 31 comunidades étnicas colaborando en el desarrollo del distrito.