El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, estableció como requisito fundamental para cualquier negociación con Estados Unidos que el presidente Donald Trump abandone su lenguaje despectivo hacia el líder supremo Ali Khamenei, destacando que dicha actitud ofende a millones de sus seguidores. Las declaraciones fueron publicadas en la red social X, indicando que cualquier acercamiento diplomático dependerá de este cambio de tono.
Contexto de tensiones internacionales
El anuncio de una posible reunión entre representantes de ambos países por parte de Trump se produjo durante la cumbre de la OTAN en La Haya, aunque el gobierno iraní mantiene que aún no se ha tomado una decisión definitiva sobre su participación en nuevos diálogos. Esta incertidumbre ocurre en medio de un escenario de hostilidades recientes que involucran a múltiples actores globales.
Ataques y represalias en la región
El 13 de junio, Israel lanzó una ofensiva contra Irán alegando preocupaciones sobre su programa nuclear, acusación que Teherán rechaza sistemáticamente. La respuesta de Irán incluyó múltiples lanzamientos de misiles, escalando la situación. El 22 de junio, Estados Unidos se involucró directamente mediante bombardeos a instalaciones nucleares iraníes ordenados por Trump, a pesar de informes de inteligencia estadounidense que indicaban ausencia de componentes militares en el programa persa.
El conflicto registró una nueva escalada cuando Irán atacó la base militar estadounidense en Al-Udeid (Catar) el 23 de junio, antes de que entrara en vigor un cese al fuego el día 24. Este acuerdo decretado tras doce días de enfrentamientos dejó un saldo de centenares de fallecidos y miles de heridos en ambos bandos.
Reacciones internacionales
Las acciones estadounidenses fueron rechazadas por Rusia, China y diversos otros países, evidenciando la polarización global ante el conflicto. Las tensiones diplomáticas continúan en diversos frentes, con anuncios recientes como la suspensión de negociaciones comerciales entre Trump y Canadá, mientras se espera definir el futuro de las relaciones entre Irán y Estados Unidos.
