Descartan intervención oficial en decisión de red de televisión
La representante institucional Karoline Leavitt aclaró que la interrupción del espacio nocturno conducido por Jimmy Kimmel resultó exclusivamente de decisiones corporativas de la cadena ABC, descartando cualquier influencia presidencial.
“La decisión de despedir a Jimmy Kimmel y cancelar su programa fue tomada por los ejecutivos de ABC, como se ha informado, y puedo asegurarles que no fue una decisión de la Casa Blanca. El presidente de los Estados Unidos no ejerció ninguna presión”, afirmó la vocera durante su comparecencia oficial.
Contexto de controversia
Los comentarios del presentador sobre el fallecimiento del activista conservador Charlie Kirk generaron una fuerte reacción entre sectores políticos, culminando en la suspensión indefinida del programa por parte de la empresa televisora el pasado miércoles.
El titular de la FCC, Brendan Carr, había manifestado públicamente posibles acciones regulatorias contra las estaciones afiliadas de ABC que transmitían el show, horas antes de conocerse la determinación de la empresa.
Reacciones políticas
El senador republicano Ted Cruz expresó preocupación por las implicaciones de estas acciones, describiéndolas como “peligrosas como el infierno” y alertando sobre posibles consecuencias negativas para grupos conservadores en caso de un cambio de administración.
“Fue una decisión de ABC, porque Jimmy Kimmel mintió deliberadamente a su audiencia en su programa sobre la muerte de un hombre muy respetado, en un momento en que nuestro país estaba de luto. Si bien el presidente está de acuerdo con esta decisión, nosotros no tuvimos nada que ver”, reiteró la portavoz.
Clarificación sobre momentos clave
Leavitt detalló que el mandatario desconocía los acontecimientos hasta que ella misma le proporcionó la información durante su estancia en el Reino Unido para actividades oficiales, negando cualquier coordinación previa entre la administración y la empresa televisora.
