La subsecretaria para América Latina y el Caribe, Raquel Serur Smeke, sostuvo que conceder asilo político a Betsy Chávez, ex primera ministra del Perú, no representa una acción hostil hacia ese país, sino una medida pacífica y profundamente humanista enmarcada en la tradición diplomática de México.
Una tradición de protección internacional
Durante su participación en la Conferencia del Pueblo en Palacio Nacional, destacó que el país ha mantenido históricamente una postura de defensa hacia quienes enfrentan persecución por sus convicciones o actividades políticas, actuando siempre conforme al derecho internacional.
La funcionaria recordó que tanto el asilo como el refugio están plenamente reconocidos en la Constitución mexicana, en la legislación nacional y en compromisos internacionales, con el propósito fundamental de proteger la vida, la libertad y la integridad física de las personas.
Derechos humanos y soberanía nacional
“Son figuras humanistas que buscan proteger a las personas. Solicitar asilo político o refugio es un derecho humano, y otorgarlo es un derecho soberano de México”, afirmó Serur.
Subrayó que México ha sido refugio para quienes escaparon de regímenes autoritarios a lo largo del siglo XX, recordando el apoyo brindado por el presidente Lázaro Cárdenas a los republicanos españoles en 1939, así como a perseguidos políticos durante las dictaduras en Chile, Argentina, Paraguay, Brasil y varios países de Centroamérica.
“Como dijo el presidente Cárdenas cuando recibió a los exiliados españoles: no los recibimos como náufragos, sino como exponentes de la causa imperecedera de las libertades del hombre”
Discernimiento entre delito común y persecución política
Serur puntualizó que, cuando existen acusaciones por delitos comunes, corresponde al Estado mexicano evaluar si dichos cargos encubren en realidad una persecución de carácter político, ya que “ningún gobierno que persigue por motivos políticos lo reconocerá abiertamente”.
En este sentido, reafirmó que el otorgamiento de asilo se realiza bajo estrictos criterios legales y humanitarios, sin injerencia ni desafío a otras naciones soberanas.
Compromiso con los principios humanistas
La subsecretaria calificó al asilo político como “una de las instituciones más nobles de México”, y aseguró que el país continuará honrando su vocación solidaria, ofreciendo protección a quienes la necesiten, siempre basado en principios de justicia, derecho internacional y respeto a la dignidad humana.