Posición contradictoria del presidente
El mandatario estadounidense, Donald Trump, lanzó una declaración que parece contradecir la iniciativa negociadora presentada por su representante especial ante Irán. Durante un evento público, el presidente enfatizó que exige la eliminación total del programa nuclear iraní como condición para cualquier levantamiento de sanciones.
Discrepancias en mensajes oficiales
Existen diferencias notables entre las posiciones expresadas por el presidente y las transmitidas por Steve Witkoff, encargado de las negociaciones. Mientras Trump insiste en prohibir completamente el enriquecimiento de uranio, Witkoff ha presentado una propuesta que contempla permitir niveles reducidos para usos civiles. Esta tensión se manifiesta en declaraciones como la publicada por el presidente:
“Bajo nuestro posible acuerdo —¡No permitiremos ningún enriquecimiento de uranio!”
Detalles de la propuesta
Según reportes periodísticos, la iniciativa de Witkoff permitiría a Irán mantener capacidades limitadas de enriquecimiento para fines médicos y energéticos, siempre que cerrara temporalmente sus instalaciones subterráneas. Esta idea revive un concepto de consorcio regional para manejar el enriquecimiento, similar al considerado durante las negociaciones que culminaron en el pacto nuclear de 2015.
Rechazo al acuerdo anterior
El actual gobierno ha mantenido una postura crítica hacia el convenio firmado durante la administración Obama. Trump justifica su oposición en que dicho acuerdo, aunque restringía el enriquecimiento, no eliminaba por completo las capacidades nucleares de Irán. Esta visión motivó la salida de Estados Unidos del pacto en 2017.
Contexto internacional
Las revelaciones del Organismo Internacional de Energía Atómica indican que Irán ha incrementado sus reservas de uranio enriquecido a niveles cercanos a los necesarios para armamento. Aunque Teherán asegura que su programa es exclusivamente pacífico, sus declaraciones recientes sugieren una posible ambigüedad respecto a sus intenciones nucleares.
Reacciones diplomáticas
La propuesta estadounidense incluye concesiones que podrían generar tensiones con aliados clave como Israel. Además, recupera elementos similares a los contenidos en el acuerdo de 2015, lo que ha generado críticas de sectores que demandan un enfoque más estricto en el desmantelamiento nuclear iraní.
