Iniciativa docente impulsa creación colectiva
La profesora Alicia Aguilar Hernández, mediadora de lectura en la primaria José María Morelos de San Nicolás (Tequisquiapan, Querétaro), logró plasmar las voces de 344 estudiantes de 2 a 15 años en un proyecto editorial innovador. La iniciativa surgió en 2013 con talleres semanales que evolucionaron en 2018 hacia un proceso estructurado de selección de vocabulario.
“El proyecto gustó tanto, esa vez hicimos una edición de 200 ejemplares, se agotaron, ya no tenemos ninguno”, recordó la docente, destacando el impacto inicial que derivó en financiamiento estatal para ampliar el programa a múltiples instituciones educativas.
Selección de vocabulario con perspectiva infantil
Durante 15 sesiones formativas, los participantes eligieron 234 palabras clave tras la lectura de diez libros previamente seleccionados. La metodología consistía en responder a la pregunta:
“si todas las palabras del mundo desaparecieran, ¿con cuáles te quedarías de este libro?”
Esta dinámica permitió recopilar interpretaciones como la de Adael (9 años) sobre zoológico:
“es la cárcel de los animales”
o la de Jocelyn (10 años) respecto a migrante:
“una persona que se va de tu vida”
Alicia Aguilar destacó la sorpresa ante la elección de conceptos complejos como divorcio, muerte o gobierno, demostrando la capacidad analítica de las nuevas generaciones. La docente, con formación en mediación de lectura por el Programa Nacional Salas de Lectura y la Universidad Autónoma Metropolitana, enfatizó la importancia de
“ver cómo observan, cómo se apropian del mundo y cómo van tejiendo sus historias”
Impacto personal y profesional en participantes
La experiencia marcó profundamente a quienes participaron. Ariana Sánchez Martínez, quien definió al maestro como
“una persona que inventa y hace juegos para no aburrir a los niños”
, calificó el proceso como
“un gran logro que tuvimos nosotros como a corta edad, o sea, escribir un libro, un diccionario, así entre todos”
Itzel Guadalupe Cervantes Álvarez, quien definió el estrés como
“cuando sientes que ya no puedes con todo lo que te rodea en el día”
, describió la experiencia como
“único en el que he podido participar y en el que pude expresar lo que pensaba”
. Esmeralda Nieto García, con su definición de carta como
“una hoja blanca donde puedes escribir algo que te da pena decirlo”
, valoró el momento como
“interesante, bonito y único que no se podrá repetir”
Expansión del proyecto y reflexiones finales
El éxito del primer volumen, con 200 ejemplares agotados, permitió una segunda edición en 2022 con mil copias, gracias al Fondo Editorial de Querétaro. La iniciativa se expandió a comunidades de Ezequiel Montes, San Juan del Río y otras regiones del estado.
Rafael Mata Salinas, director de proyectos artísticos de la Secretaría de Cultura, y la cronista municipal de Cadereyta, plantearon replicar el modelo para explorar
“cómo cambia el significado de las palabras según el contexto y edad”
. Esta visión prospectiva refleja el potencial pedagógico del proyecto.
La maestra Alicia Aguilar concluyó con una reflexión profunda:
“Es algo que me apasiona mucho y a mí me causa mucho conflicto la situación en la que dice que no leemos, porque los niños y niñas sí leen, leen mucho… tenemos que ver qué pasa o en qué momento dejamos de hacerlo”