El deterioro financiero de Petróleos Mexicanos (Pemex) ha generado alertas sobre la posibilidad de que el Ejecutivo federal implemente una medida de salvamento económico equiparable al Fobaproa, mecanismo utilizado en el pasado para estabilizar instituciones críticas.
Analistas del sector económico destacan que la empresa petrolera mexicana enfrenta serias dificultades de rentabilidad, colocándola entre las peores del mundo en comparación con grandes productores internacionales. La situación ha generado preocupación en círculos financieros, donde se teme que el gobierno deba asumir parte de su deuda para evitar un colapso mayor.
Contexto de crisis
La falta de rentabilidad de Pemex se ha convertido en un punto focal de discusión entre especialistas, quienes advierten que su actual estado podría forzar intervenciones estatales sin precedentes desde la década de 1990. La analogía con el Fobaproa surge precisamente por la magnitud de la deuda acumulada y el riesgo sistémico que podría representar para la economía nacional.
“Las finanzas de Pemex están en niveles críticos“, señaló un experto bajo condición de anonimato. “Si no se toman medidas urgentes, el impacto podría extenderse más allá del sector energético“, agregó.
