Confirmación de reanudación gradual
Jaguar Land Rover, la compañía automotriz más importante del Reino Unido, anunció este lunes que iniciará progresivamente sus actividades productivas en los próximos días después de una interrupción causada por un ciberataque que se registró el 31 de agosto pasado.
“Hoy informamos a nuestros compañeros, distribuidores y proveedores que algunas secciones de nuestras operaciones de fabricación se reanudarán en los próximos días”, indicó la empresa en un comunicado oficial, resaltando los esfuerzos continuos para asegurar que la reincorporación a la normalidad se lleve a cabo bajo condiciones óptimas de seguridad.
Reconocimiento al personal y respaldo gubernamental
La empresa expresó su agradecimiento hacia “todos los colaboradores de JLR por su continua paciencia, comprensión y apoyo”, al tiempo que admitió que “aún queda mucho por hacer” para alcanzar la recuperación completa de todas sus instalaciones.
El fin de semana, el gobierno británico confirmó una línea crediticia destinada a la corporación por un monto equivalente a 1,719 millones de euros (aproximadamente 2,000 millones de dólares), diseñada específicamente para “dar certeza a su cadena de suministro”. El financiamiento, respaldado por el mecanismo gubernamental de Garantía de Desarrollo de Exportaciones, tendrá un plazo de devolución de cinco años y servirá para fortalecer la liquidez de la empresa.
“Este ciberataque no fue sólo un ataque a una marca británica icónica, sino a nuestro sector automovilístico líder a nivel mundial y a los hombres y mujeres cuyo sustento depende de él”, afirmó el ministro de Negocios y Comercio, Peter Kyle.
Impacto en la industria y empleos
La empresa, adscrita al conglomerado indio Tata Motors desde 2008 y responsable de la producción de las reconocidas líneas Jaguar y Land Rover, representa un pilar fundamental en la economía británica, empleando directamente a 34,000 personas.
La suspensión temporal de sus operaciones ha generado efectos colaterales en cientos de empresas que forman parte de su red de proveedores, afectando potencialmente a miles de empleos indirectos en el sector automotriz del país.