Rubén Moreira Valdez, diputado federal del PRI, denunció que la estrategia ferroviaria impulsada durante la administración de Andrés Manuel López Obrador ha resultado en un rotundo fracaso, exponiendo a los pasajeros a riesgos innecesarios y malgastando cantidades significativas de dinero público. Su postura surgió tras el reciente descarrilamiento del Tren Interoceánico cerca de Nizanda, en Oaxaca, incidente en el que se encontraban a bordo 241 personas, además de 9 miembros de la tripulación.
Exigencia de rendición de cuentas en el Legislativo
El legislador exigió que los titulares de las dependencias responsables de los proyectos del Tren Maya y del Tren Interoceánico comparezcan de inmediato ante la Cámara de Diputados. Su objetivo es que expliquen no solo el suceso ocurrido, sino también el estado real de las inversiones públicas realizadas en dichas iniciativas, así como la viabilidad técnica, operativa y financiera de ambos trenes.
Moreira Valdez criticó con dureza la forma en que se diseñaron y ejecutaron estos megaproyectos, calificándolos como iniciativas improvisadas, mal construidas y basadas en decisiones improvisadas. Destacó que la seguridad de los usuarios está en peligro y que los recursos del erario se han despilfarrado sin control.
Proyectos insostenibles y desvío de recursos
El exgobernador de Coahuila urgió a la actual administración a revisar a fondo todos los proyectos heredados, especialmente aquellos que consideró como ocurrencias costosas. Pidió que no se detenga la investigación hasta esclarecer el destino final del dinero público destinado a estas obras y determinar si verdaderamente son sostenibles a largo plazo.
Señaló que hay pruebas suficientes de que el Tren Maya, al que calificó como “otro de los fracasos de la pasada administración”, no genera ingresos suficientes para mantenerse operativo, lo que obliga a atar el presupuesto nacional durante décadas para cubrir sus gastos de funcionamiento.
“En los momentos en los cuales se requieren recursos para mejorar la salud, atender al campo, México los pierde en proyectos atrasados”
Prioridades distorsionadas en infraestructura
El coordinador parlamentario del PRI reconoció la necesidad de modernizar las vías de comunicación del país, pero insistió en que estas mejoras no deben depender de decisiones impulsivas ni de proyectos mal planeados. Subrayó que, aunque las carreteras y aeropuertos nacionales requieren atención urgente, reciben escasos recursos, mientras que grandes sumas se destinan a iniciativas ferroviarias de dudosa viabilidad.
“Es evidente que las carreteras y aeropuertos del país requieren mejoras; sin embargo, se destina poco a estas obras de infraestructuras, mientras se tira el dinero en proyectos como el Tren Maya y en la dudosa viabilidad del interoceánico”
La bancada del PRI reafirmó su postura: cualquier inversión en infraestructura debe estar sujeta a estudios rigurosos, transparencia y sostenibilidad presupuestal, no a decisiones aisladas sin fundamento técnico.
