La jefa del Ejecutivo federal, Claudia Sheinbaum, reafirmó el respaldo continuo del gobierno hacia los familiares de las personas afectadas por el descarrilamiento del Tren Interoceánico registrado el 28 de diciembre en la Línea Z, ubicada en el Istmo de Tehuantepec, estado de Oaxaca.
“A todas y todos se les va a seguir apoyando, tanto a las personas hospitalizadas como a quienes lamentablemente perdieron a un ser querido. Hemos dispuesto de un servidor público por cada familia para acompañarlos de manera permanente”, declaró la mandataria, quien calificó el suceso como “muy doloroso lo que ocurrió”.
Atención directa a víctimas y familias
Durante su visita del lunes a instalaciones médicas en Tehuantepec y Salina Cruz, así como a una funeraria, la presidenta sostuvo encuentros con heridos y parientes de quienes fallecieron. El objetivo fue supervisar personalmente la atención brindada y ofrecer solidaridad en medio del duelo.
El siniestro tuvo lugar en el trayecto comprendido entre Nizanda y Chivela, cuando la locomotora principal descarriló, provocando daños en múltiples vagones que transportaban a 241 pasajeros.
Balance del accidente y acciones inmediatas
Las autoridades reportaron 13 muertes, todas ya identificadas, y 98 personas lesionadas. De acuerdo con información del IMSS, aproximadamente 36 continúan hospitalizadas, sin que ninguna se encuentre en condición crítica.
La Fiscalía General de la República (FGR) lleva a cabo las investigaciones correspondientes para determinar las causas del accidente, mientras que el gobierno federal enfoca sus esfuerzos en la atención a las víctimas y en realizar una revisión profunda de la infraestructura ferroviaria. Este análisis es clave para asegurar la seguridad antes de retomar la operación del servicio.
Para quienes requieran información o asistencia, se mantiene activa la línea telefónica de la Secretaría de Gobernación: 55-22-30-21-06.