El Consejo General del Instituto Nacional Electoral tomó una decisión unánime al cerrar definitivamente el expediente que involucraba a Pío López Obrador y David León Romero. Este proceso se originó a partir de una serie de videos revelados en 2020 por el periodista Carlos Loret de Mola a través de Latinus, donde se observaba al hermano del expresidente Andrés Manuel López Obrador recibiendo sobres manila con efectivo de parte de David León, quien fungía como asesor en el gobierno de Chiapas.
Investigación y hallazgos
Tras cinco años de investigaciones, el órgano electoral determinó que no existen pruebas suficientes que demuestren una conexión entre los recursos mostrados en las grabaciones y el financiamiento de campañas políticas de Morena durante el periodo 2015-2018. Los análisis técnicos, contables, fiscales y financieros realizados no lograron establecer el origen, monto, destino o propósito político del dinero.
Limitaciones en la investigación
La investigación enfrentó obstáculos significativos debido a la falta de colaboración de la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales, que no compartió información crucial. A pesar de los peritajes y revisiones realizadas, no se encontraron registros que respaldaran las acusaciones.
Reacciones políticas
- Carla Humphrey Jordan: La consejera destacó la necesidad de mejorar los mecanismos de fiscalización.
- PAN y PRI: Criticaron la decisión, describiéndola como “corrupción a la vista de todos” y recordando que el propio expresidente había reconocido que los fondos eran para apoyar su movimiento político.
- Guillermo Santiago (Morena): Defendió la resolución, afirmando que “no hay pruebas, no hay delito, no hay financiamiento paralelo” y destacando que el expresidente no intervino en el proceso.
“No hay pruebas, no hay delito, no hay financiamiento paralelo”